Durante los primeros 13 años de su vida, Genie Wiley vivió aislada en una pequeña habitación, atada a un orinal o encerrada en una cuna improvisada. Apenas se le permitía moverse, hablar, ni ver la luz del sol. Su padre, convencido de que el mundo era peligroso, la condenó a un encierro brutal que le robó su infancia, su lenguaje… y su identidad. En 1970, Genie fue descubierta por los servicios sociales de Los Ángeles. Lo que siguió parecía un rayo de esperanza: médicos, psicólogos y lingüistas comenzaron a estudiarla como un “caso único” de aprendizaje del lenguaje tardío. Pero pronto, los intereses científicos se mezclaron con la ambición, y Genie pasó de ser víctima de un monstruo a ser explotada por la ciencia. En este episodio de Archivos del Horror, exploramos la historia real de Genie Wiley: una niña maltratada, estudiada como un experimento humano, y finalmente abandonada por todos. Una vida marcada por el silencio, donde la crueldad y la negligencia no terminaron cuando se abrieron las puertas de su prisión… sino que apenas comenzaban.
